9 sept 2010

EDICIÓN Nº 30 JULIO-AGOSTO 2010


El Turismo y la Educación


Argentina cuenta con un inmenso territorio con todos los climas y geografías, paisajes sin igual para disfrutar estando en contacto con la naturaleza. Es el territorio ideal para el turismo aventura, con infinidad de posibilidades y emociones para los amantes de este tipo de prácticas.


El Turismo de Aventura es una tipología turística en auge y popularidad en San Luis, debido a que las motivaciones de los turistas implican la exploración y activismo en la búsqueda de  vacaciones inusuales, diferentes de las típicas de sol y playa.
Desde la cátedra que me corresponde “Turismo y Recreación” del Prof. de Educación Física del Inst. de Formación Docente Continua “Juan Pascual Pringles”, se trabaja primero en la descripción de estas actividades; mediante comentarios y análisis de diferentes prestadores de servicios turísticos, enfatizando sobre las tareas previas a su planificación. Para luego brindar a los futuros profesores, las herramientas conceptuales necesarias para planificarlas desde el marco teórico.
A continuación les ofrezco el trabajo realizado por Ivana Paola Cerizola, alumna de 4º Año del Profesorado de Educación Física.

Cómo planificar actividades turísticas-recreativas
Debemos enfatizar los siguientes aspectos:
En cuanto al destino: lugar (montañoso, llano, existencia de ríos, lagunas, embalses, etc.) - Clima - Espacios cerrados o abiertos (museos, actividades lúdicas) - Solución de dificultades que se presenten en el cumplimiento del programa.
En cuanto al turista y sus necesidades: Cantidad de personas - Edad - Aptitudes físicas - Seguridad (botiquín de primeros auxilios y comodidades, por ej. Bicicleta: casco. Calzado adecuado, vestimenta cómoda, etc.) - Ficha Médica.
Todas estas recomendaciones se les comunican antes de iniciar las actividades y al momento de la presentación del guía o instructor de la actividad, a cargo del grupo también para asistir e informar durante los diferentes programas a recorrer.
¿Qué tener en cuenta si la excursión se realiza con alumnos?
¿Dónde iremos de excursión? Si el lugar cuenta con los servicios de sanidad básicos - ¿Qué edades tienen los alumnos? - ¿Existe alguna característica específica que deba ser tenida en cuenta? - Necesidades educativas especiales - ¿Cantidad que irán? ¿Qué actividades se dejaran preparadas para los alumnos que se quedan en el colegio? - ¿Cuándo se va a realizar la salida, el horario? - ¿Por qué se realizará dicha excursión? Objetivos y contenidos educativos. - ¿Qué aportes se realizarán desde las diferentes áreas para que tal actividad sea considerada interdisciplinaria? - ¿Qué actividades se realizarán cuando lleguemos? - ¿Cómo nos vamos a desplazar hasta el lugar (medios de transporte)? - ¿Cómo será financiada la actividad (por los alumnos, por el centro educativo)? - ¿Qué recursos humanos son necesarios para realizar dicha actividad? (cantidad de maestros, instructores, etc.) - ¿Qué equipamiento deberían llevar los alumnos? (vestimenta, calzado adecuado y cómodo, mochila, alimentos, protector solar, etc.) Es importante recordar que antes de realizar cualquier salida de campo, deben haber sido tratados previamente los contenidos que se van a trabajar de forma interdisciplinaria.
Las últimas consideraciones a tener en cuenta, previas a realizar la actividad serán: No olvidar la autorización de los padres - Recordar las normas que deben de cumplirse al realizar una salida en un entorno natural (cuidado del medio ambiente, orden en el transporte, seguir las indicaciones del docente) - Tener previsto un plan de evacuación en caso de accidente o lesión (tel. de contacto, botiquín, ubicación del centro de salud más cercano)
¿Qué tener en cuenta durante la salida? Pasar lista de asistencia antes de salir - Realizar controles periódicos de evaluación durante el desarrollo de las actividades - Recordar las normas básicas de comportamiento (actitudes de comportamiento: durante el trayecto del viaje; en el medio natural, cómo desechar los residuos en lugares apropiados, etc.) - Respetar la continuidad del cronograma de actividades ya planificadas.